El pasado 16 de enero de 2023, se reestrenó en Netflix la película: I, Tonya (Yo soy Tonya), filme que previamente fue exhibido en cines a finales del 2017, para poder participar en las diversas contiendas de premios que se realizaron a principios del año siguiente; la cinta está basada en hechos reales, sobre: la vida, carrera y escándalos de la patinadora olímpica Tonya Maxene Harding (1970 – ).
La película tiene un formato de falso documental, que muestra entrevistas realizadas a los propios personajes, así como la dramatización de los hechos; según la crítica, este formato buscó evitar las comparaciones entre las personas reales entrevistadas y los actores que interpretarían la historia. El filme está dirigido por Craig Gillespe quien también dirigió Cruella (2021).
I, Tonya, está protagonizada por la actriz australiana Margot Robbie a quién vimos en Escuadrón suicida (2016, 2021) y Aves de presa (2020); el coprotagonista es el actor Sebastian Stan, histrión recurrente en el Universo Cinematográfico de Marvel; también, actúa en la parte antagónica Allison Janney, quien participó en el thriller cinematográfico Lou (2022).
La historia de I, Tonya muestra de manera cronológica como fue la infancia, adolescencia y parte de la vida adulta de la patinadora olímpica; una vida de pobreza, lucha, sacrificio, éxito y fracaso. Tonya fue inscrita por su madre desde muy pequeña para tomar clases de patinaje sobre hielo, debido a que la niña mostraba dotes de patinadora y se le vislumbraba un futuro prometedor en ese deporte.
Desde pequeña, Tonya fue víctima de la violencia intrafamiliar ejercida por su propia madre, con sus constantes ataques físicos y verbales, tanto en su hogar como en público, la señora ejerció la violencia de manera sistemática contra su hija.
Además, Tonya fue blanco de críticas en el patinaje artístico, porque era pobre y no podía comprar los atuendos adecuados para las competencias; se casó en 1988 a sus 18 años con un hombre violento que la maltrató y que años después arruinó su carrera deportiva, cuando éste planeó eliminar de la competencia a su principal rival, mandándola a golpear y lesionándole una rodilla el 6 de enero de 1994; cuando esto se supo, la prensa enloqueció y dio una amplia cobertura al caso. Para ese entonces, Tonya tenía 24 años y por el escándalo mediático, su carrera terminó por imposición de un juez, quien la encontró coparticipe de los hechos violentos contra la también patinadora Nancy Kerrigan.
En el año 2018, la actriz Margot Robbie fue nominada como mejor actriz a los BAFTA, los Globos de Oro y los Óscares, por su interpretación de Tonya Harding, pero no logró obtener ninguno de los premios; por otro lado, la actriz Allison Janney fue nominada a los mismos premios en la categoría de mejor actriz de reparto, por interpretar a la madre de la patinadora, llevándose las tres preseas a su casa. En la plataforma de streaming, I, Tonya es una de las películas más vistas en su semana de estreno, a pesar de su formato poco convencional y porque algunos críticos la consideran una comedia oscura con tintes de crítica social.
